¡EL baile del verano!

Cual hijo pródigo, Alianza volvió a casa y había que celebrar el regreso, ponerle color a la fiesta y festejar con los suyos. La situación lo ameritaba y se desató el jolgorio en Matute.Era la ocasión para reconciliarse con su gente, olvidar las penurias y hacer latir fuerte ese corazón blanquiazul que añora alegrías. Y así fue, con un 3-1 contundente sobre Ayacucho FC.Atrás quedaron los lamentos, las tristezas y sinsabores. En casa solo hay lugar para la sonrisa y lo entendieron bien los grones, que armaron el baile.Jean Deza fue el hombre orquesta -y eso que solo jugó 38’-, brindando desequilibrio, buen toque y sabor al ataque. Sus desbordes provocaron la desesperación rival, por eso Guerra le pegó y se fue expulsado.La alegría se contagió a Cueva, Costa y Noronha, quienes hicieron su trabajo. Así, “Aladino” abrió la cuenta de penal a los 36’ -tras falta inexistente de Villasanti a Noronha- y la historia se empezó a teñir de blanquiazul.A los 40’ Costa conectó con precisión un centro de Li, y la algarabía era total. La paz había vuelto a Matute.ESE DE NEGRO...En el segundo tiempo (47’) el chibolo Canales prolongó la felicidad de certero cabezazo. Nada parecía capaz de empañar esta dicha, pero  Colán marcó el descuento a los 74’ aprovechando un “horror” de Aparicio.El rival se vino con todo, pero el árbitro Haro colaboró con el festejo íntimo obviando un penal y anulando un gol. En medio de la polémica, Alianza triunfó y gozó en su fortín.