Se golpean el pecho

Se entiende, todo se les iba de las manos, en este caso de los pies. Se entiende, pero no se justifica. Y a un día de las patadas y puños frente a los policías, ayer llegó el arrepentimiento.La primera voz de los blanquiazules fue de Koichi Aparicio, justamente uno de los que protagonizó el altercado. El defensor no se escondió, dio la cara.“Simplemente ofrecer disculpas, no fue la mejor respuesta, fue un impulso. Fue en defensa propia porque llegaron y de manera prepotente nos atacaron”, mencionó el zaguero.Como se recuerda, todo se dio porque el juez de línea le anuló un tanto a Mauro Guevgeozián, lo que hubiera significado el empate. Al final del cotejo todos se fueron a reclamarle a Fredy Arellanos y luego a su terna.Se supo que en la directiva íntima están más que incómodos, pues lo ideal era que coloquen a réferis FIFA y así evitar este tipo de inconvenientes.SANCIÓNDe otro lado, LÍBERO supo que hoy se dará a conocer el informe de Arellanos y se sabrá si es que hay o no algún sancionado. En Matute están cruzando los dedos.