Estabas “Zorrito”

Wilmer Aguirre entró por Atoche para darle más peso al poder ofensivo, pero su actuación, lejos de contribuir para el triunfo, fue algo similar a una película de terror.El delantero pagó caro su falta de ritmo, pues, ni bien ingresó y fue buscado por los compañeros en lugar de dar soluciones, fue la piedra en el zapato de un grupo que sorprendía a propios y extraños tocando de memoria.En la primera opción de gol, Aguirre demoró su remate y efectuado el disparo este choca sobre su marcador. Pero la segunda chance pérdida fue la peor. Debía tocar el balón y era gol, pero, esta se le pasó por los pies tras pase de Costa.