Un Café cortado

Sangre, sudor y fútbol fue lo que aportó James Rodríguez en el partido ante Liverpool. El “colocho” fue el que más corrió en Anfield (11.931 metros), metió un pase magistral para el gol de CR7 y empezó a ganarse el cariño de su hinchada.

James es todo un guerrero dentro de la cancha, no “arruga” a la hora de meter y defender a su equipo. En el minuto 14, se cortó la ceja tras chocar con un rival, la situación no llegó a mayores y siguió jugando.

El “colocho” la “rompió” y promete ser clave en el clásico ante Barcelona. “Me siento en confianza. He sabido retribuir la oportunidad del técnico, ahora quiero ser más protagonista”, sostuvo el crack “cafetero”.

Luego, añadió: “Espero ganar el clásico y seguir demostrando mis condiciones. Cada vez estoy más compenetrado con el equipo y eso se refleja en el campo”, expresó el “10”, que se ha convertido en el cerebro del equipo blanco.