Contigo soy feliz

La experiencia en el temible “Scratch” la pone Robinho. El delantero del Santos busca una “segunda juventud” con la selección y ante Japón demostró que aún puede dar más, haciendo sentir su magia en los minutos que jugó.

Entró a los 65’ y desde ese momento buscó generar jugadas de gol. La más fructífera fue la que comenzó con Kaká y terminó en el cabezazo de Neymar para sellar el 4-0 final.

“Estamos mejorando, pero queremos la Copa (América). Tenemos muchas cosas por delante. Los que estamos aquí tenemos que aprovechar nuestras chances”, dijo “Robi”.

El “7”, de 30 años, se desvivió en elogios para su brother Neymar. “Es un jugador espectacular. Hasta bromeé diciendo que haría tres, pero terminó marcando cuatro”, agregó.